La Airef afirma que la revalorización de las pensiones con el IPC (13.500 millones de euros) deja al Gobierno sin margen para más gasto público

Cristina Herrero, presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) calcula que habrá que revalorizar las pensiones al 9%, lo que costará 13.500 millones de euros de los 15.000 millones de aumento de gasto recomendados para 2023. Esto dejaría al Gobierno sin espacio para aumentar el gasto social o de defensa.

Herrero advirtió que “la inflación aumenta los ingresos a corto plazo pero deteriora las finanzas públicas a medio plazo porque también presiona al alza los gastos, y en este sentido el ejemplo más paradigmático es el aumento del gasto en pensiones que se producirá el próximo año y que crecerá en torno al 9%”, ha dicho, recordando que la reforma de las pensiones vincula su revalorización al IPC, lo que supondrá un incremento de la factura pública de unos 13.500 millones de euros. En este punto, Herrero ha defendido que asumir tal carga de nuevos gastos estructurales, un estado debe buscar ingresos estructurales en paralelo.

Herrero ha recordado que la Comisión Europea ya ha recomendado a países muy endeudados, como España, que no aumenten su gasto corriente por encima de su crecimiento potencial, que en el caso de España limita el aumento a unos 15.000 millones de euros. Dado el gasto ya previsto en pensiones, dijo, “el crecimiento del resto del gasto corriente sería prácticamente nulo”, apuntó. En otras palabras, el gobierno no tendría espacio para aumentar la mayor inversión en defensa comprometida con la OTAN o el gasto social que prometió a sus socios parlamentarios a cambio de su apoyo presupuestario. No, al menos, sin alimentar de nuevo el déficit y la deuda, por lo que Herrero insistió en la necesidad de un plan de consolidación fiscal a medio plazo lo antes posible.