noviembre 8, 2024

Complete News World

Empresarios más generosos que el gobierno

2 min read

Fernando González Urbaneja | Los empresarios y los sindicatos han llegado a un acuerdo sobre la política de ingresos que es coherente con los precedentes firmados en las últimas décadas. No hay ruptura en la política de pacto social que ha acompañado a la democracia española durante décadas. El convenio (una subida salarial del 4% en 2023 y del 3% en 2024) es orientativo, una recomendación para la negociación colectiva descentralizada, miles de convenios sectoriales, provinciales, de empresa… que ocupan cada año los llamados agentes sociales, sindicatos y patrones que representan todos los tipos y condiciones.

Sin un acuerdo nacional indicativo, la negociación social efectiva en empresas y sectores no se detiene, pero dicho acuerdo nacional ayuda a la negociación proporcionando un marco de referencia. Además, el acuerdo social envía una señal a los ciudadanos de serenidad, de que las personas pueden entenderse si dialogan y saben escuchar, dar un poco y encontrarse a mitad de camino. El acuerdo sorprendió a algunos, especialmente a quienes no estaban familiarizados con la historia de las relaciones laborales y la fuerza del acuerdo como alternativa a la disputa. Una cosa es hablar frente a un micrófono y otra muy distinta sentarse en el trabajo todas las mañanas para hacer el trabajo.

A falta de conocer todos los detalles del documento de recomendaciones que firmarán esta semana los representantes gremiales y empresariales, lo que está sustancialmente claro es que cada parte ha dado en sus pasos la búsqueda de un nombre común. En materia salarial, aún en el centro de esta negociación, el acuerdo establece una trayectoria de tres años (2023-25) con incrementos salariales ligeramente más generosos que los fijados por el Gobierno para los funcionarios sin impugnación sindical. Los empresarios acordaron la actualización parcial (hasta un punto) de las tablas salariales si la inflación supera el incremento salarial pactado. Esta no es la indicación que reclaman los sindicatos, aunque lo parezca.

READ  Con el cierre de la plataforma petrolífera de Casablanca, España pone fin a casi 60 años de producción de petróleo

Algunos lamentan que la negociación no haya integrado nociones más modernas y decisivas como la productividad o la participación en la distribución de ganancias (y, en su caso, pérdidas). Hay convenios de empresa que contemplan estos elementos y que gozan de buena reputación entre los firmantes, lo que sugiere que, tarde o temprano, estos aspectos entrarán en la negociación colectiva. No es fácil, pero el camino se hace caminando y en este momento parece que caminan los patrones y los sindicatos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *