noviembre 18, 2024

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La socialista Chivite ultima una coalición para gobernar en Navarra – Radio Centro

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Después de semanas de intensas negociaciones, María Chivite, secretaria general de los socialistas en Navarra, está a punto de alcanzar un preacuerdo para reeditar el Gobierno de coalición progresista junto a Geroa Bai para la legislatura 2023/2027.

Aunque todavía no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, se espera que el PSN gestione la Presidencia y ocho carteras, Geroa Bai la vicepresidencia segunda y cuatro áreas, y Contigo/Zurekin una cartera reforzada con las competencias de Vivienda, con la posibilidad de que su líder, Begoña Alfaro, sea vicepresidenta tercera.

La participación de EH Bildu será necesaria para que esta coalición supere al bloque de la derecha en la investidura.

Se ha generado una tormenta política entre EH Bildu y UPN a raíz de las joyas de la alcaldesa de Pamplona.

Geroa Bai ha perdido votos y escaños en las elecciones forales, por lo que el PSN consideró necesario ajustar su presencia en el Gobierno. Hubo tensiones entre Geroa Bai y el PSN ya que la formación vasquista exigió negociar directamente con Chivite y retener ciertas posiciones en el gabinete.

Finalmente, se ha alcanzado un acuerdo en el que Geroa Bai retendrá cuatro áreas, entre ellas la de Salud. El PNV también tendrá una cartera en Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, una en Relaciones Ciudadanas y una vicepresidencia económica.

El acuerdo ya se había puesto en marcha con la cesión a Geroa Bai de la Presidencia del Parlamento. Ahora, el PSN está dispuesto a ceder también el senador autonómico a Geroa Bai.

El Gobierno, de confirmarse este acuerdo a tres, tendría mayoría con 21 de los 50 escaños en el Parlamento. EH Bildu sería clave para la mayoría en la acción legislativa o en los presupuestos.

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La investidura debe formalizarse antes del 28 de agosto. Si no hay acuerdos, el Parlamento se disuelve automáticamente tras tres meses de las elecciones.

Estas negociaciones han generado críticas por parte de la oposición, que las considera un “espectáculo” y un “juego de tronos en toda regla”.

Después de varias semanas de intensas conversaciones, se espera que María Chivite, secretaria general del Partido Socialista de Navarra (PSN), llegue a un preacuerdo con el partido Geroa Bai para formar un gobierno de coalición progresista en la legislatura 2023/2027. Aunque aún no se ha llegado a un acuerdo definitivo, se espera que el PSN se haga cargo de la Presidencia y ocho carteras ministeriales, Geroa Bai asuma la vicepresidencia segunda y cuatro áreas, y Contigo/Zurekin tenga un ministerio reforzado con competencias en vivienda, con la posibilidad de que su líder, Begoña Alfaro, sea vicepresidenta tercera.

La participación de EH Bildu será necesaria para que esta coalición supere al bloque de la derecha en la investidura.

Sin embargo, se ha generado una controversia política entre EH Bildu y UPN debido a las joyas de la alcaldesa de Pamplona.

Geroa Bai sufrió una pérdida de votos y escaños en las elecciones regionales, lo que llevó al PSN a considerar necesario ajustar su presencia en el gobierno. Surgieron tensiones entre Geroa Bai y el PSN, ya que el partido vasco exigió negociar directamente con Chivite y retener ciertas posiciones en el gabinete.

Finalmente, se ha alcanzado un acuerdo en el que Geroa Bai retendrá cuatro áreas, incluida la de Salud. El Partido Nacionalista Vasco (PNV) también tendrá un ministerio de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, así como uno de Relaciones Ciudadanas y una vicepresidencia económica.

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El acuerdo comenzó con la cesión de la Presidencia del Parlamento a Geroa Bai. Ahora, el PSN está dispuesto a ceder también el senador autonómico a Geroa Bai.

Si se confirma este acuerdo a tres bandas, el gobierno tendrá mayoría con 21 de los 50 escaños en el Parlamento. EH Bildu será clave para lograr la mayoría en la acción legislativa o en los presupuestos.

La investidura debe ser formalizada antes del 28 de agosto. De lo contrario, el Parlamento se disolverá automáticamente tres meses después de las elecciones.

Estas negociaciones han generado críticas por parte de la oposición, que las considera un “espectáculo” y un “juego de tronos en toda regla”.

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