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2 min readLos presidentes de Colombia y Venezuela se reunieron el martes por la tarde por primera vez en seis años mientras los dos vecinos intentan restablecer los lazos diplomáticos y comerciales.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, quien asumió el cargo en agosto y es el primer líder izquierdista del país, viajó a Caracas el martes para reunirse con Nicolás Maduro, quien resistió un intento respaldado por Estados Unidos de derrocar el palacio presidencial de Venezuela a principios de 2019.
Estados Unidos, el Reino Unido y algunos otros países aún reconocen al político opositor Juan Guaidó como el presidente legítimo de Venezuela, calificando de farsa la reelección de Maduro en 2018. Colombia formó parte de esa coalición, aunque Petro ha priorizado la política exterior para normalizar las relaciones con Maduro.
“Hay que mantener la amistad entre los dos pueblos”, dijo Petro en un comunicado junto a Maduro frente a un retrato del héroe revolucionario Simón Bolívar. “Aquí, después de años, un presidente colombiano y uno venezolano vuelven a encontrarse y conversar, y aquí estamos retomando un camino difícil, pero hay que hacerlo”.
Maduro lo calificó como “un primer encuentro realmente auspicioso, productivo, con buenos resultados”.
Los dos líderes discutieron la cooperación en materia de cambio climático, narcotráfico y comercio. El comercio entre los dos países alcanzó los $7 mil millones en 2007, antes de que la economía de Venezuela colapsara y las relaciones entre los dos países se deterioraran.
Antes de partir hacia Caracas, Petro fue criticado por grupos de derechos humanos y políticos de la oposición por ignorar el historial de derechos humanos de Maduro. Una misión de investigación de la ONU en septiembre concluyó que las fuerzas de inteligencia venezolanas eran culpables de abusos sistemáticos.
“Colombia debería priorizar la obtención de compromisos concretos de derechos humanos por parte de las autoridades venezolanas”, dijo Human Rights Watch en una carta a Petro la semana pasada.
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